Sí, tengo experiencia planificando ambas visiones de forma estratégica. Dependiendo del proyecto, utilizo múltiples cámaras o defino el producto como un montaje híbrido, donde se priorizan las escenas según la fuerza de la imagen. Esto garantiza un equilibrio entre la fotografía y el video, asegurando un resultado sólido en ambos formatos.
Por eso, limito el montaje en video a 1-2 minutos. Si se requiere una cobertura mayor, puedo integrar a otro fotógrafo con quien trabajo y ajustar el presupuesto según las necesidades del proyecto.